¿Se (sub)desarrolla Mariel?


Por Caperucita Re-verde

Desde la primera etapa de la Zona Especial Desarrollo (ZED) Mariel entre 2011 y 2014, muchos estamos preocupados de su “Desarrollo”, porque lo de “Especial” ya lo sabemos, o peor, sufrimos.

Esta “Zona” ha sido una de las más depredadas y contaminadas del país. Los proyectos megalómanos industriales de los 70’ y 80’ con la construcción de una fábrica de cemento y una termoeléctrica que todavía asfixia a sus habitantes, así como los distintos planes agropecuarios, entre ellos el fracasado henequén, transformaron el paisaje irreversiblemente.

Mariel formaba parte de un continuo de vegetación de manigua y bosque costeros que se extendía desde Cabañas hasta Hicacos, del que hoy sólo quedan unos pocos relictos en Canasí y Varahicacos. Entre los valores que todavía se conservan están 4 subespecies de caracoles terrestres de la especie Ligus fasciatus (una de las más abundantes, pero mayormente fuera del Sistema de Áreas Protegidas, según un informe del CNAP). Entre las subespecies presentes en Mariel están: Ligus fasciatus howelli, L. mcgintyi, L. nobilis, y L. tabioi.

Actualmente, con el desarrollo de la infraestructura y sobre todo del dragado de la bahía para permitir la entrada de los barcos denominados New Panamax, estos representantes de la malacofauna cubana pueden ser vulnerables a sufrir algún tipo de impacto.

El paisaje ha sido fuertemente transformado. Según fuentes oficiales se han construido 11,7 km de viales de cuatro carriles y 9 puentes, 11 km de redes de acueductos y 1,5 km de alcantarillado, 8 km de fibra óptica, 6,6 km de alumbrado público y 1 planta de tratamiento de residuales (no sabemos si en funcionamiento), además de 57,1 km de vías férreas rehabilitadas y 21 km construidas que enlazan la ZED con La Habana, proveedora fundamental de la fuerza de trabajo que se estima entre 70 mil a 120 mil trabajadores, sólo en el llamado Sector A.

Roilan Rodríguez, Director de Inversiones Mariel dijo a CubaDebate que “para el abasto de agua se ubicó una fuente en el poblado de Matienzo que son unos pozos que están en el kilómetro 40 de la autopista Habana-Pinar los cuales tienen un potencial de explotación hasta el año 2040. Por su parte la energía quedó asegurada con la colocación de una subestación de 110/34.5 Kv en Quiebra Hacha y la alimentación directa desde la termoeléctrica del Mariel y otra línea de suministro procedente de Guanajay”. Actualmente no sabemos la disponibilidad de agua para las comunidades cercanas, pero sería suficiente para 23 años de consumo.

También se espera instalar 4 parques fotovoltaicos de 50 Megawatts según Alfredo López Valdés, Ministro de Energías y Minas durante una reciente comparecencia televisiva. Estos parques están concebidos para la inversión extranjera.

Richmeat, Devox, ProFood, Teconsa, Brascuba, Unilever, Bouygues son los nombres de algunas transnacionales que debemos monitorear desde ahora para sus respectivos desempeños ambientales (si las autoridades permiten el acceso a la información por parte de la ciudadanía, claro). La ZED Mariel tiene actualmente 19 usuarios aprobados, 10 empresas de capital totalmente extranjero, 4 mixtas, 4 cubanas y un contrato de asociación económica internacional.

Entre las empresas extranjeras se encuentran 2 belgas, 2 mexicanas, 2 españolas, 2 brasileñas, 2 holandesas, 1 surcoreana, 1 francesa, 1 vietnamita y 1 de Singapur, y entre los sectores se destacan la logística, el transporte y la infraestructura, la fabricación de sensores térmicos, pinturas, estructuras metálicas, el procesamiento de cárnicos, la producción de jugos y dispensadores de bebidas, cigarrillos, artículos de aseo, jeringuillas y culeros desechables.

Por otra parte, los casi 9 millones de m3 de fondo marino que serán removidos y la consiguiente turbidez y aumento de la salinidad del agua, han comenzado a afectar las crestas arrecifales, los manglares y otros ecosistemas. El dragado de la bahía se realiza en tres puntos: el canal de acceso con 3 millones de m3, la trinchera y caja de atraque con 990 mil m3 y la dársena de maniobras con 5 millones de m3.

Por entrevistas que El Guardabosques realizó en la ZED supimos que se prevé mantener los parches de manglares que quedan a las orillas del río Bongo, hasta su desembocadura en la bahía, para aprovechar sus servicios ecosistémicos, entre ellos la estabilidad de la línea costera, la filtración de los sedimentos arrastrados por los ríos, la captación de CO2 y como barrera contra la intrusión salina y refugio de muchas especies de aves, peces y crustáceos en sus primeras etapas de desarrollo.

Hasta ahora no se afectaron e incluso se habla de restaurarlos. Esperamos que así sea, aunque debemos darle seguimiento y estaremos pendientes a las primeras señales de alarma que indiquen estrés en los ecosistemas. En el caso de los manglares, el crecimiento del perejil de costa asociado a los bosques de mangle prieto y yana, sería indicador de alta salinidad con alteraciones del ciclo hidrológico y de nutrientes, lo cual afectaría la altura del manglar. En el caso de las crestas arrecifales de playa Herradura, los niveles altos de nutrientes y la pérdida de los principales herbívoros (Ej: peces loros y erizos negros de púas largas), tendrían como principal indicador de estrés el crecimiento de macrolagas carnosas, lo cual estaremos evaluando.

Esperamos que la estación que monitoreará los niveles de contaminación de los usuarios de la ZED según el proyecto original, amplíe sus objetivos e incluya la rehabilitación, restauración y conservación de estos importantes ecosistemas que garanticen que la ZED no contribuya al (sub)desarrollo (in)sostenible de aquel ahora, bendito lugar.

Publicado por guardabosquesdecuba

Webmaster del blog Guardabosques

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.